>>>VENECIA CATENARIA
La ampliación del cementerio se plantea como un cuerpo diferenciado e independiente, un conjunto de montículos artificiales que recrean las topografías meándricas de las marismas. Se trata de una reproducción de los recorridos y los espacios propios de estas zonas inundadas, muy influenciadas por la laguna de Venecia y por los enrevesados canales que recorren la ciudad, teniendo como mayor exponente el Gran Canal, con un trazado muy similar a los propuestos para la nueva ampliación.
Se crea un cuerpo exento continuando las medidas y la forma del lado este del actual cementerio de San Michele, conectado a la superficie existente por medio del sistema de embarcaderos “Archipiélago artificial”, creando pasarelas flotantes con usos adosados como pabellones, miradores o espacios de estancia y descanso. Al mismo tiempo se implantan dos nuevos embarcaderos con el mismo sistema, mejorando las conexiones de la nueva ampliación y de todo el conjunto. En esta parte predomina la topografía y los canales, creando un sistema de islas y meandros que contienen en su perímetro las zonas de enterramiento, dejando el resto como zona de estancia, un nuevo parque para la ciudad de Venecia. Se crean así unos recorridos de agua que permiten al visitante llegar hasta las zonas de enterramiento en barca, una experiencia completamente diferente a la que se tiene en el cementerio actual.
La primera follie propuesta se trata de un espacio interior-exterior, destinado al paseo, la meditación y la ofrenda. Una serie de cúpulas catenarias de planta azarosa crean un espacio al aire libre, pero protegido al mismo tiempo, a modo de corredores o deambulatorios.
Se plantea una topografía artificial que brota de los islotes que forman los meandros. Esta nueva topografía contiene en su interior los nichos de enterramiento, que en ascienden en forma de espiral hasta la parte superior de la construcción. Una rampa acompaña el recorrido de los enterramientos hasta el espacio superior, horadado, que ofrece vistas de la actuación completa, y un espacio para la reflexión y el recuerdo de los seres queridos enterrados en el cementerio.
Se organizan a lo largo y ancho de todo el cementerio, creando agrupaciones aleatorias con una densidad constante junto con los silos de las flores, muy relacionados con esta construcción.
Para las viviendas previstas en la ampliación se opta por un esquema de claustro clásico, en el que un patio interior articula todas las estancias, creando un espacio común de socialización, un patio jardín al que se asoman todas las catenarias habitables, del que toman las vistas, la luz y el aire.
Se propone un crecimiento fractal y orgánico, pudiendo repetirse de forma azarosa el esquema de patio central al rededor del cual se organizan las
estancias.